Este proyecto surge de la necesidad de un cliente con una amplia colección de coches, para guardarlos y exhibirlos.

Construido en un terreno anexo a la casa principal, ya existente. Se proyectó como ampliación a la casa original creando un gran jardín con un gran salón que funciona como espacio gastronómico con una cocina profesional, comedor para 40 personas y una sala de estar. A un lado del salón, con un acceso controlado, hay un vestíbulo al que se llega también desde la calle y que da acceso al elevador de coches, a la escalera de acceso al jardín y a la gran escalera que baja al salon de coches.

En el sótano de estacionamiento hay, además, una sala de trofeos y colección de miniaturas desde la que se tiene acceso a un stand de tiro para uso recreativo.

La fachada principal del salón está forrada con mármol, igual al de la casa existente, para dar continuidad al proyecto original y respetar la arquitectura existente de la casa. El salón principal tiene lambrines de duela de madera y mármol busardeado para lograr un espacio limpio y de poco mantenimiento pero con la misma calidez y aspecto natural que el resto de la casa.

El sótano de estacionamiento es de concreto armado con plafones aserrados que simulan entradas de luz natural y el piso es vinílico de alto tráfico que evita mantenimiento y soporta el rodamiento perfecto de los coches.

La escalera que baja al sótano esta construida en dos rampas principales, la primera construida con mármol travertino y la segunda, que llega al sótano, de acero inoxidable.